Iris Disse


Der Tod tanzt mit
Radio Drama
Las llamaban "las hacedoras de ángeles de Nagyrév", las mujeres del pequeño pueblo húngaro situado en lo más profundo del sureste del país. La historia había comenzado, como se suele decir, de forma bastante lujuriosa. Porque cuando los hombres de las mujeres de Nagyrév estaban en el frente durante la Primera Guerra Mundial, no sólo sabían cuidar de la casa y la granja, sino también de su bienestar femenino. Las reclusas del cercano campo de prisioneros de guerra desempeñaron un papel decisivo en ello. Cuando sus maridos regresaban de la guerra, heridos y amargados, se deshacían de ellos con la ayuda del arsénico. Ya no las querían, estaban acostumbradas a cosas "mejores" de los prisioneros de guerra. En algún momento, sin embargo, las autoridades se dieron cuenta del creciente número de muertes. Y el drama siguió su curso.
La obra radiofónica narra esta frenética serie de asesinatos con ambigüedad cómica y desde diferentes perspectivas. Está la comadrona que distribuyó el veneno; la madre que mató a su marido, a su amante y más tarde a su vecina; una joven que mata a un antiguo amante y -por error- a su marido, y el investigador que finalmente saca a la luz los asesinatos. Sin olvidar las discusiones de las señoras y señores de la guardería de ancianos de Nagyrév, que aún hoy lo recuerdan vívidamente.
La mayor parte de las grabaciones para la obra radiofónica se realizaron con músicos y actores en el lugar de los hechos, en el paisaje fluvial de Nagyrév y sus alrededores.
